“Stranger Things” es la serie del momento.
Sólo 8 capítulos alcanzaron para captar la atención del mundo en pocas semanas y fundamentalmente de toda una generación que creció con la cultura pop de los ochenta. Es que la producción de Netflix es un homenaje a películas como “ET”, “Encuentros cercanos del tercer tipo”, “Cuenta conmigo”, “Poltergeist”, “Exploradores”, “Los Goonies” y “Alien”, por citar sólo algunas.
Está ambientada en 1983, en un pueblo imaginario llamado Hawkins, en el estado de Indiana, EE.UU., y los autos que aparecen en escena reflejan de manera impecable aquella época. Cada uno de ellos acompaña a sus protagonistas y contribuye en este viaje a nuestra infancia en una trama que combina suspenso, ciencia ficción y culto a la amistad. Repasemos algunos de los autos de esta primera temporada.
La Blazer del comisario
En Hawkins nunca pasaba nada pero de repente el comisario Jim Hopper debe salir de su oficina y subirse a su impecable Chevrolet Blazer bicolor (crema y marrón) a buscar pistas.
El Pinto de la mamá de Will
Se trata del primer auto compacto que la marca del óvalo desarrolló para el mercado estadounidense por la crisis del petróleo.
El Galaxie de Jonathan
Jonathan Byers es un adolescente poco sociable y aficionado a la fotografía que tiene un imponente Ford Galaxie 500 de 1964, un sedán casi desconocido para los argentinos, que monta un motor V8. Típico auto (viejo, descuidado y gastador) que podía comprar un joven de clase media-baja como él.
El 442 del papá de Will
El señor Byers maneja un impecable Oldsmobile Cutlass 442 de 1972, una coupé negra con detalles en dorado que es su gran orgullo. El 442 era la alternativa de Oldsmobile a otros muscle car de GM con mayor fama como el Pontiac GTO y el Chevrolet Chevelle.
El Beeme de Steve
Steve es uno de los chicos populares de la escuela, todo un conquistador de chicas. Y este galán de “familia bien” no podía andar en un auto cualquiera, por lo que los productores de la serie decidieron que su auto sea un flamante BMW 733i.
Es el único auto “no americano” de la serie y del mismo año, 1983. Lo raro es que no eligieron que sea un coupé o un cabrio sino un cuatro puertas señorial y de color ¡marrón!
La rural de la mamá de Mike
Karen, la mamá de Mike, es el mejor amigo de Will, está siempre ocupada con el trabajo y su beba, por lo que no está nunca en casa. Y para reflejar esa vida familiar, en la serie la pusieron al volante de un Mercury Grand Marquis Colony Park, una station wagon bien americana (con detalles símil madera, como corresponde).
Las van de la compañía de energía
Hay toda una flota de Chevrolet Chevy Van 30 merodeando el pueblo. Parecen recién salidas de fábrica, todas blancas con las inscripciones en azul: “Hawkins. Power and Light”. Pero necesitaron tantas que en alguna escena la producción introdujo alguna varios años más nueva (se nota por el diseño de la parrilla).
Los Ford oficiales
¿Qué les sugiere la aparición en escena de una flota de autos negros, todos iguales? Seguramente, nada bueno. No vamos a decir nada más para evitar spoilear pero hay varios Ford Crown Victoria LTD que van de un lado para el otro llevando gente de traje oscuro…
El VW de Barb
Barbara no es linda ni popular, pero es de esas amigas incondicionales ¡Y qué lindo auto para una estudiante de secundario! Maneja un Volkswagen Golf Cabriolet celeste.
¿Vieron la serie? ¿Qué les parecen estos autos?
Fuente: cosasdeautos
Marcela
¡me gusta el descapotable!